¿Qué es la mentoplastia y para qué sirve?
¿Qué es la mentoplastia y para qué sirve?

En CIMOH Centro Médico Odontológico de Hidalgo Dr. Vargas Maxilofacial somos un grupo de especialistas dedicados a la atención integral en cavidad oral y reconstrucción facial, mediante técnicas modernas y novedosas, ubicadas en la ciudad de Pachuca, Hidalgo.
¿Qué es la mentoplastia y para qué sirve?
La mentoplastia, también conocida como cirugía de mentón o genioplastia, es un procedimiento quirúrgico que tiene como objetivo mejorar la apariencia del mentón, ya sea aumentando o disminuyendo su tamaño. Esta cirugía puede realizarse por razones estéticas o para corregir problemas funcionales, como dificultades para hablar o masticar.
El mentón es una parte importante del rostro, ya que influye en el equilibrio y la armonía de las proporciones faciales. Un mentón pequeño, retraído o asimétrico puede afectar la autoestima y la confianza de una persona, así como generar problemas de salud bucodental. Por el contrario, un mentón grande, prominente o desproporcionado puede dar una impresión de agresividad o dureza.
La mentoplastia busca crear un perfil más armónico y atractivo, corrigiendo las anomalías del mentón, ya sean congénitas o provocadas por algún accidente. La cirugía se puede realizar de diversas formas, dependiendo de las necesidades y expectativas de cada paciente.
Algunas de las técnicas más comunes son:
- La implantación de una prótesis de mentón: se trata de colocar un implante de silicona o de otro material biocompatible en el hueso del mentón, a través de una incisión dentro de la boca o debajo del mentón. Esta técnica es la más sencilla y rápida, y permite aumentar el tamaño y proyectar el mentón hacia adelante.
- La infiltración de tejido graso del propio paciente: se trata de extraer grasa de alguna parte del cuerpo del paciente, como el abdomen o los muslos, y luego inyectarla en el mentón, para darle más volumen y definición. Esta técnica es más natural y evita el riesgo de rechazo o infección, pero puede requerir varios retoques, ya que la grasa se puede reabsorber con el tiempo.
- El adelantamiento de una parte del hueso de la mandíbula: se trata de realizar una osteotomía, es decir, un corte en el hueso de la mandíbula, y luego fijar la nueva posición con una placa de titanio. Esta técnica es la más compleja y precisa, y permite modificar la forma y el ángulo del mentón, así como corregir problemas de mordida o de articulación temporomandibular.
La mentoplastia se puede realizar bajo anestesia local o general, y suele durar entre una y dos horas. En la mayoría de los casos, se trata de una cirugía ambulatoria, es decir, que el paciente puede regresar a casa el mismo día. Sin embargo, en algunos casos, puede ser necesario pasar una noche en el hospital, para controlar la evolución del paciente.
Los beneficios de la mentoplastia son:
- Un mentón más definido y proporcionado, que mejora el perfil y la armonía facial.
- Una mayor confianza y seguridad en uno mismo, al sentirse más satisfecho con su imagen.
- Una mejor función oral y respiratoria, al corregir problemas de mordida o de articulación.
- Una cicatriz imperceptible, ya que la incisión se realiza dentro de la boca o debajo del mentón.
Los riesgos y complicaciones de la mentoplastia son:
- Infección, sangrado o hematoma en la zona operada.
- Rechazo, desplazamiento o rotura del implante, en caso de usar una prótesis.
- Asimetría, irregularidad o insatisfacción con el resultado.
- Alteración de la sensibilidad o del movimiento del labio inferior o del mentón.
- Daño en los nervios, los vasos sanguíneos o los dientes.
Los cuidados después de la mentoplastia son:
- Aplicar frío en la zona operada, para reducir la inflamación y el dolor.
- Tomar los medicamentos recetados por el cirujano, para prevenir la infección y aliviar el malestar.
- Mantener una buena higiene bucal, usando un enjuague antiséptico y cepillando los dientes con cuidado.
- Evitar el tabaco, el alcohol y los alimentos duros, picantes o ácidos, que puedan irritar la herida o dificultar la cicatrización.
- Dormir con la cabeza elevada, para favorecer el drenaje y evitar la presión sobre el mentón.
- Usar una faja o una venda compresiva, según las indicaciones del cirujano, para proteger y sostener el mentón.
- Evitar el ejercicio físico intenso, los golpes o los movimientos bruscos, que puedan comprometer el resultado o causar complicaciones.
- Acudir a las revisiones periódicas con el cirujano, para evaluar la evolución y retirar los puntos de sutura.
El resultado definitivo de la mentoplastia se puede apreciar a partir de los tres o seis meses, cuando la inflamación ha desaparecido y los tejidos se han adaptado. La mentoplastia es una cirugía que ofrece resultados duraderos y naturales, siempre que se realice por un cirujano cualificado y experimentado, y se sigan las recomendaciones postoperatorias.